El azul del tarro de vidrio se inspira en el color del mar Mediterráneo. Este lujoso difusor, revitalizante y lleno de sorpresas, captura la belleza natural de la costa amalfitana y envuelve tu hogar con el suave aroma de las higueras bajo el sol radiante. Las luminosas notas altas de bergamota, limón, pomelo y cedro se unen a los matices de néctar de higo, pimienta rosa y pétalos de jazmín, que dan paso a una armoniosa base compuesta por toques de higuera, cedro y benjuí.

Familia olfativa: verde, amaderada
Buqué: bergamota italiana, limón italiano, pomelo, néctar de higo, pimienta rosa, pétalos de jazmín, higuera, cedro y benjuí

Capacidad: 180 ml
Duración: 10-12 semanas

ENVASE: El difusor de fragancia viene en un frasco de vidrio azul que evoca el icónico frasco art déco de la firma.
El envase se la elaborado con papel FSC reciclable.
"IMPORTANTE: PRECAUCIONES DE USO

Para garantizar una experiencia óptima con el difusor para el hogar, Acqua di Parma recomienda lo siguiente:
• Desenrosca la tapa y retira la placa interior. Vuelve a colocar la tapa e inserta las cañas en el frasco.
• Antes del primer uso y de darles la vuelta a las cañas, es necesario humedecerlas durante veinticuatro horas.
• La frecuencia con la que se giran algunas o todas las cañas determina la intensidad de la fragancia: cuanto más se giran, mayor es la intensidad. Si la difusión es demasiado intensa, quita algunas cañas hasta lograr el nivel deseado.
• Para prolongar la duración de la fragancia, se recomienda evitar las altas temperaturas, la luz solar directa y la circulación de aire intensa, ya que pueden acelerar la evaporación.
• Coloca el difusor de fragancia para el hogar sobre una superficie plana donde no quede expuesto a la humedad.
• Mantenlo alejado de niños y animales.
• Mantenlo alejado de calor, superficies calientes, chispas, llamas abiertas y otras fuentes de ignición.
• El concentrado de fragancia contiene materias primas naturales, por lo que su color puede variar ligeramente con el tiempo, sin afectar a la experiencia olfativa.
• Después de manipular las cañas de ratán, es recomendable lavarse las manos con agua limpia y jabón.
• El líquido y los vapores son muy inflamables.